Santiago está conmocionado por el lúgubre panorama en la urbanización Las Damas ll, donde la contaminación del agua ha cobrado una vida y ha dejado a numerosas personas hospitalizadas debido a vómitos y diarrea. La comunidad clama por soluciones inmediatas.
Desde el 28 de mayo, un aroma desagradable impregna el aire de la urbanización Las Damas ll en la ciudad de Santiago. Sus habitantes se han visto sumidos en una profunda desolación debido al hedor, la suciedad y la turbidez del agua suministrada por la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago, Coraasan.
De la desesperación a la esperanza: Las Damas II encuentra alivio tras la solución de Coraasan
En un acto desesperado, los residentes recurrieron repetidamente a Coraasan, implorando una solución a este calvario. La entidad, finalmente, respondió a sus súplicas y envió técnicos al lugar para tomar muestras del agua. El análisis reveló una alarmante contaminación, lo que llevó a la pronta intervención de Coraasan para drenar y limpiar todo el sistema. Sin embargo, esta aparente solución trajo consigo un mal inesperado.
Desde entonces, numerosas personas, incluyendo a inocentes niños, han caído víctimas de un insidioso malestar, caracterizado por vómitos y diarrea implacables.
La gravedad de la situación se hizo evidente con la trágica historia de doña Iluminada Rodríguez de Salas, una vecina de Las Damas ll. Afectada por los síntomas debilitantes, fue llevada al Materno Infantil el domingo pasado, donde la deshidratación provocada por los vómitos y la diarrea implacables le arrebató la vida en la noche de ayer.
Ante esta calamidad, Pedro de la Cruz, en un comunicado dirigido al Diario Cibao, hizo un llamado urgente a toda la comunidad, instando a cualquier persona, sea niño o adulto, que experimente síntomas de vómito y diarrea a buscar atención médica de inmediato. Su advertencia se extiende a los habitantes de Las Damas y las comunidades vecinas, con la esperanza de prevenir más tragedias y asegurar el cuidado adecuado para aquellos que se ven afectados por esta angustiosa situación.
