Reuniones secretas en Santiago respaldan a Raquel Peña como precandidata presidencial del PRM, desatando tensiones internas. La posible bendición de Abinader podría encender una crisis en el partido oficialista.
Por La Confidente
Dicen por ahí que donde hay humo, siempre hay fuego, y en las entrañas del PRM parece que la llama de la discordia está empezando a arder. La Confidente, siempre con un ojo puesto donde otros no miran, ha descubierto que las pretensiones de José Ignacio Paliza por contener los proyectos presidenciales "fuera de tiempo" no son más que palabras que el viento se lleva.
Entre cafés cargados y conversaciones al filo de la madrugada, se han llevado a cabo reuniones secretas en las imponentes mansiones de algunos de los empresarios más poderosos de Santiago. Estos encuentros no son simples tertulias; son movimientos en un tablero de ajedrez donde el apoyo a una figura nacida en el mismísimo corazón del Cibao, Raquel Peña, está siendo sellado. Y aunque Peña nunca ha estado inscrita en las filas del PRM, eso no ha frenado a quienes la ven como la próxima gran apuesta.
Imagínate, lector, el revuelo si el presidente Abinader decide dar su bendición a Raquel. Sería como lanzar un jarro de agua fría sobre las aspiraciones de otros candidatos del PRM. Las malas lenguas susurran que este apoyo podría ser percibido como una imposición, un juego de cartas marcadas donde los recursos del Estado inclinarían la balanza de las primarias internas. ¿Y qué dicen los analistas? Pues que esto podría detonar una crisis de proporciones insospechadas dentro del partido.
Pero el enigma no termina ahí. La Confidente ha sabido que Raquel no está sola en esta travesía. Entre los nombres que destacan en su equipo político están Jean Luis Rodríguez y Adolfo Pérez, respaldados además por figuras como el senador Daniel Rivera, el exsenador Eduardo Estrella y el senador Antonio Marte. Un equipo robusto, bien conectado y dispuesto a mover cielo y tierra.
Así que, mi gente, sigan atentos, porque los secretos en política nunca se guardan por mucho tiempo, y en el Cibao, donde todo se sabe, las piezas se siguen moviendo. ¿Será este el inicio de un juego que cambiará el rumbo del PRM? Como dicen por aquí, "cuando el río suena, es porque agua lleva".