La trágica noticia de los dos hermanitos que fallecieron calcinados en un incendio ocurrido ayer en San Francisco de Macorís, provincia Duarte, ha conmocionado a toda la comunidad. La pequeña Wandaly Rivera Castro, de solo un añito, y Wilfry Rivera Castro, de tres años, perdieron la vida mientras dormían en su modesta vivienda de madera en el sector Los Jardines.
La tarde de ese fatídico domingo quedó marcada por el horror y la desesperación. Sin embargo, un tercer niño, también hermano de las víctimas, logró escapar de las llamas a tiempo, aunque no sin sufrir quemaduras leves.
Vecinos cuentan que los pequeños estaban solos en la casa porque su madre, quien se encuentra embarazada, tuvo que salir a buscar comida. Mientras el padre trabajaba en su taller mecánico, la mujer intentó comunicarse con él para que les llevara alimento, pero al no poder establecer contacto, decidió ir a casa de la bisabuela de sus niños.
Las causas del incendio aún son desconocidas y están siendo investigadas por los Bomberos y el Ministerio Público. Cuando el Cuerpo de Bomberos llegó al lugar del siniestro, lamentablemente todo ya estaba consumido por las llamas.
Los vecinos están desconcertados y aseguran que no escucharon ninguna explosión. Además, señalan que la madre de los pequeños no solía dejarlos solos. "Esa mujer no se descuidaba de sus muchachos, donde quiera para arriba y para abajo era con sus tres muchachos", expresó José Agustín Pimentel, consternado por la tragedia.
Es una historia desgarradora que nos recuerda la fragilidad de la vida y la importancia de cuidar a nuestros seres queridos. Esperamos que el niño sobreviviente se recupere pronto y enviamos nuestras condolencias a la familia en este momento tan difícil.
