Persisten las lluvias en la provincia, afectando subestaciones eléctricas, dejando a estudiantes varados y poniendo en alerta a las autoridades y socorristas.
Sánchez Ramírez. – La provincia Juan Sánchez Ramírez enfrenta una severa emergencia climática con el desbordamiento de ríos e inundaciones, generando evacuaciones masivas y caos en diversas comunidades. Las fuertes lluvias, que parecen no dar tregua, han desencadenado una serie de situaciones críticas que requieren una respuesta inmediata por parte de las autoridades y los cuerpos de socorro.
El río Capacho, en Cotuí, se desbordó, sumiendo al sector Las Flores en una inundación que afectó la gran mayoría de las viviendas. La magnitud de la emergencia se evidenció aún más al colapsar la subestación eléctrica de Cotuí, dejando a la comunidad sin suministro eléctrico y aumentando la complejidad de la situación.
En la Universidad Uteco, los estudiantes quedaron varados, y una camioneta del servicio de seguridad fue arrastrada por las aguas. Milagrosamente, el chofer de la universidad logró salvar su vida, pero la tragedia dejó en evidencia la peligrosidad de la situación.
Las autoridades y los cuerpos de socorro se movilizan para intervenir en diversas zonas afectadas por el desbordamiento del río Capacho. Simultáneamente, otras áreas de la provincia Sánchez Ramírez también enfrentan situaciones críticas, obligando a evacuar a 130 familias y habilitar 94 albergues para proporcionar refugio a quienes se ven afectados por las inundaciones.
Aníbal Aldemaro Rodríguez, director de Defensa Civil en la zona, informa sobre la magnitud de la crisis y destaca la importancia de la colaboración de todos los sectores en las jornadas preventivas. El comité de prevención, mitigación y respuesta de la localidad se mantiene en sección permanente, coordinando esfuerzos para hacer frente a la emergencia.
La persistencia de las lluvias eleva la preocupación y llama a la población residente en zonas vulnerables a no resistirse en caso de evacuaciones. Distritos municipales como La Bija, Platanal, La Cueva, y otras localidades rurales quedan incomunicados, agravando la complejidad de la situación.
En Cotuí, el desbordamiento del río San Francisco amenaza con dejar incomunicada a Quita Sueño y afectar el sistema eléctrico de esta zona turística, intensificando los desafíos para las autoridades y socorristas. La emergencia climática en Sánchez Ramírez exige una respuesta coordinada y urgente para hacer frente a esta situación crítica que afecta a cientos de familias y comunidades enteras.
