Por Hugo Gómez
Cayó abatido esta noche en Santiago uno de los presuntos delincuentes que le quitaron la vida al funcionario de Coraapplata, Michel Vásquez González durante un asalto perpetrado en Puerto Plata el pasado domingo.
El nombrado Amfri José Rómulo alias el Cojo, quien fue la persona que le disparó a Juan Michel Vásquez González, murió luego de enfrentarse a tiros con un contingente policial, comandado por el coronel Félix Valoy Peralta y el teniente coronel Aneury Ruiz, comandantes del Dicrim en Santiago y Puerto Plata.
Los agentes del Dicrim hicieron contacto con Rómulo (alias el Cojo), en el sector Rafey de Santiago, donde se originó una balacera.
El otro individuo que participó en el horrendo crimen de Vásquez González, aún continúa prófugo ya que no se encontraba en el lugar, donde se registró el enfrentamiento.
A la víctima se le ocupó una pistola calibre nueve milímetros.
El vocero de la Policía Nacional en Santiago, capitán Fernando Perez Valerio, confirmó a Diario Cibao la muerte del cojo.
En el momento del enfrentamiento con las autoridades, Juan de Dios Gómez López también era sospechoso del asesinato de Misael Luciano, conocido como El Secre, un reconocido mecánico de motocicletas en Santiago. El presunto asaltante habría estado involucrado en otro atraco en el sector Los Ciruelitos, al norte de Santiago, donde Misael Luciano perdió la vida tras ser mortalmente herido durante un intento de robo.
La Policía Nacional continúa las investigaciones para esclarecer completamente estos casos y determinar si hay otros implicados en los crímenes. El cuerpo del cojo será sometido a los procedimientos legales correspondientes, y se espera que las autoridades proporcionen más detalles sobre el operativo en las próximas horas.
Su abatimiento representa un paso importante en la lucha contra la delincuencia en Puerto Plata y Santiago, brindando un alivio a la comunidad afectada por estos violentos actos. El vocero policial de Santiago, sostuvo que la institución reafirma su compromiso de garantizar la seguridad de los ciudadanos y perseguir a aquellos que perturban la tranquilidad social con sus acciones criminales.
