El sector transporte clama por medidas ante el alza de costos y la ineficiencia del sistema.
Santiago se ha convertido en el epicentro de una creciente ola de protestas, con los choferes de la zona norte llevando a cabo paros escalonados que han paralizado la ciudad. Este miércoles, el centro de Santiago fue testigo de una masiva paralización, donde los trabajadores del volante exigieron soluciones a las problemáticas que azotan al sector.
Las demandas son claras y contundentes: el fin de los congestionamientos vehiculares, la inclusión en el sistema integral de transporte y la distribución equitativa de las tarjetas Bonogás. Miguel Loriano, líder choferil, hizo un llamado directo al presidente Luis Abinader, instándolo a reconocer la "difícil" realidad que enfrentan miles de trabajadores del volante.
"No contamos con pensiones dignas y enfrentamos el alza en los precios de alimentos, combustibles, piezas de vehículos y medicamentos, mientras el caos en el tránsito persiste, debido a la inacción de las autoridades locales", declaró Loriano.
Las rutas afectadas por los paros incluyen la F de 100 Fuegos, la G de Gurabo, la E de El Ejido, la P de Buena Vista, y otras localidades como Tamboril, Jarabacoa, Navarrete y La Cuesta. La Federación de Taxistas y la Asociación de Propietarios de Guaguas también se han sumado a la protesta.
A pesar de las interrupciones, los transportistas han asegurado que continuarán brindando servicio a estudiantes y trabajadores durante las horas pico. Sin embargo, las manifestaciones continuarán de manera escalonada en todo Santiago hasta que el gobierno responda a sus reclamos.