República Dominicana apuesta por una reforma policial integral y participativa. Los diálogos con diversos sectores sociales buscan redefinir el papel de la Policía y fortalecer su relación con la comunidad.
Por John Santos
Santiago, República Dominicana. La transformación de la Policía Nacional dominicana ha iniciado este jueves 26 de septiembre un capítulo sin precedentes con las jornadas "Dialoguemos de Policía". Este ambicioso proyecto, impulsado por el Gobierno, busca construir una institución policial más cercana, eficiente y legítima, reflejando los anhelos y las necesidades de la sociedad dominicana.
A diferencia de reformas anteriores, esta iniciativa destaca por su carácter inclusivo y participativo. Al invitar a jóvenes, líderes comunitarios, empresarios, y hasta a los propios agentes policiales a expresar sus opiniones y propuestas, se garantiza que la reforma sea verdaderamente representativa de la diversidad de la sociedad dominicana.
La ministra Faride Raful ha sido enfática en subrayar que esta no es una reforma impuesta desde arriba, sino un proceso de co-creación en el que todos los actores tienen un papel fundamental. "Estamos escuchando a la gente, estamos aprendiendo de ellos y estamos construyendo juntos la Policía que queremos", afirmó Raful en una reciente entrevista.
Los desafíos y las oportunidades
La Policía Nacional dominicana, como muchas otras en la región, enfrenta una serie de desafíos: corrupción, falta de transparencia, uso excesivo de la fuerza y una relación distante con la comunidad. Sin embargo, esta crisis también representa una oportunidad única para transformar radicalmente la institución y construir una nueva cultura policial basada en la cercanía, la confianza y el respeto por los derechos humanos.
Las jornadas "Dialoguemos de Policía" han permitido identificar algunos de los principales problemas que aquejan a la institución, como la necesidad de una mayor capacitación, mejores equipos y una mayor diversidad en el cuerpo policial. Además, se ha puesto de manifiesto la importancia de fortalecer los mecanismos de control ciudadano y de rendición de cuentas.
Un modelo a seguir
La experiencia dominicana es un ejemplo inspirador para otros países de la región que enfrentan desafíos similares en materia de seguridad ciudadana. Al poner a la ciudadanía en el centro del proceso de reforma, República Dominicana está demostrando que es posible construir una Policía más eficaz y legítima.
¿Cuáles son los próximos pasos?
Tras la fase de diálogo y consulta, se espera que el Gobierno presente una propuesta de reforma integral de la Policía Nacional. Esta propuesta incluirá, entre otras cosas:
- Una nueva ley orgánica: Que establezca los principios fundamentales de la actuación policial y garantice su independencia y su sujeción a la ley.
- Un plan de capacitación: Para mejorar las competencias de los agentes policiales en materia de derechos humanos, investigación criminal y uso de la fuerza.
- Un sistema de evaluación y control: Para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas de la institución.
- Un programa de participación ciudadana: Para fortalecer los mecanismos de colaboración entre la Policía y la comunidad.
La implementación de esta reforma será un proceso largo y complejo, pero el compromiso del Gobierno y la sociedad civil es un factor clave para su éxito.
En conclusión
La reforma policial en República Dominicana es un proceso histórico que tiene el potencial de transformar radicalmente la relación entre la Policía y la ciudadanía. Al poner a la gente en el centro de la discusión y al promover un diálogo abierto y transparente, se está construyendo un nuevo modelo de seguridad ciudadana que puede servir de inspiración para otros países de la región.
