Por Jorge Toribio
Tras una prolongada enfermedad falleció en el día de ayer en La Vega el profesor Elpidio Gil. Un hombre que salió del Seminario para las aulas. Recordamos que en el año 1961-1962 tras la caída de la tiranía, nos llegó aquel nuevo profesor al Liceo hoy Don Pepe Álvarez. llegó a impartir Lengua Española y Religión.
Persona preocupada por el destino del magisterio, participó en los amagos sindicales de FENAMA (Federación Nacional de Maestros), y luego en la ASOMAVE (Asociación de Maestros Veganos) Ya en la década de 1970 al fundarse la ADP actual, siempre tuvimos sus buenos consejos y apoyo incondicional en nuestros afanes por acabar con los abusos que se cometían con los maestros, especialmente con los del área rural que eran sobreexplotados.
Elpidio sabía cómo ganarse la buena voluntad de todos, especialmente de sus discípulos, al punto que hubo quienes lo encontraban flojo, pero la mayoría lo encontraba justo, porque salíamos de una escuela autocrática que era un reflejo fiel de la tiranía, para entrar a una escuela democrática, basada en el respeto a los derechos humanos y a las libertades públicas y todo el mundo no sabía asimilar eso.
En 1973 ante la anarquía en las escuelas, la politización e inseguridad por las brutales incursiones policíaco militares en los centros educativos, estuvo Elpidio entre los primeros de un grupo de docentes que decidió iniciar una especie de aventura creando un colegio privado.
El centro funcionó con una filosofía muy democrática, pero basado fundamentalmente en la impartición de una docencia de calidad a la altura de los tiempos, el cual fue llamado VEGA NUEVA, porque ese era el objetivo crear una Vega diferente, donde las competencias de los graduandos aseguraba su éxito en la vida social y profesional.
Asimismo el maestro cumplió sus metas pues todos sus egresados han venido ejerciendo un gran liderazgo en esta sociedad en sus respectivas áreas. Y así fue como se mantuvo ese colegio hasta su final.
Elpidio fue el último administrador, y luego al disolverse la sociedad, quedó bajo su responsabilidad, llegando a construir un local propio, donde la voluntad de ese insigne maestro lo mantuvo abierto hasta que no pudo más.
