La Vega, República Dominicana.- Trascendió en la oscuridad de la madrugada de este sábado en La Vega el deceso del reconocido arquitecto Elías Abreu, a la temprana edad de 49 años. Su partida, tan inesperada como el alba que lo envolvía, dejó consternada a la comunidad que lo vio emerger como un faro de creatividad y talento en el campo de la arquitectura.
Según se especula, su internamiento en una sala de Cuidados Intensivos en un prestigioso centro de salud privado de esta ciudad se debió a una prematura batalla contra la Cirrosis Hepática.
Ahora, sus restos descansarán en la Funeraria Sagrado Corazón de Jesús (Blandino), erguida majestuosamente frente a la imponente Catedral Inmaculada Concepción. La misma ciudad que lo vio nacer y florecer en la profesión arquitectónica le abre las puertas de su última morada, un lugar donde el silencio y la eternidad se funden en un abrazo etéreo.
Elías Abreu, además de ser una figura destacada en el ámbito de la arquitectura, fungió como presidente de Elias Abreu & Asociados, una firma reconocida por su visión vanguardista y su capacidad de crear espacios que desafían los límites de la imaginación. A lo largo de su trayectoria, dejó una huella indeleble en cada uno de los proyectos en los que se involucró, trascendiendo las barreras de lo convencional y llevando su arte a nuevas alturas.
El fervor por el conocimiento arquitectónico lo llevó a graduarse en el año 1996 en el prestigioso Colegio Cardenal Sancha, templo de sabiduría en esta ciudad. No solo se conformó con su propio éxito, sino que compartió generosamente su experiencia como docente en la escuela de arquitectura de la Universidad Católica del Cibao (Ucateci) durante varios años.
Su pasión por el crecimiento y desarrollo de su comunidad se manifestó también en su afiliación a la Cámara de Comercio y Producción de La Vega, así como en su participación activa en la Asociación para el Desarrollo, donde dejó una profunda huella.
Elías Abreu fue, asimismo, un miembro insigne del selecto Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA) en la seccional de La Vega. Su compromiso con la excelencia y la búsqueda constante de la perfección lo convirtieron en una referencia dentro de su gremio, un líder que inspiró a muchos jóvenes arquitectos a alcanzar nuevas cotas de creatividad y originalidad.
La partida prematura de Elías Abreu deja un vacío irreparable en el mundo de la arquitectura, pero su legado trascenderá las fronteras del tiempo y su espíritu perdurará en cada estructura que diseñó y en cada corazón que tocó. La Vega llora la pérdida de uno de sus hijos más talentosos, pero también celebra su vida y su contribución invaluable al arte de crear espacios que nos hablan y nos inspiran en un lenguaje único y eterno.
