En la madrugada de este jueves 18 de mayo, miles de cibaeños despertaron sobresaltados por un temblor de tierra que desató el pánico en el Cibao. Un sismo de 5.2 grados en la escala de Richter, con epicentro en la provincia de Puerto Plata, al norte de la República Dominicana, hizo temblar los cimientos de la región como si la tierra misma quisiera contar una historia.
A las 4:45 de la madrugada, el Centro Nacional de Sismología (CNS) de la Universidad Autónoma de Santo Domingo registró el sismo, cuyo epicentro se encontró a 17 kilómetros al Este del municipio Altamira.
La profundidad del temblor, estimada en unos 10.8 kilómetros, fue lo suficientemente cercana como para que los habitantes de Puerto Plata sintieran la tierra moverse bajo sus pies.
María Jiménez, residente en el municipio de Altamira, compartió su experiencia al despertar a las 4:50 de la mañana, sacada de su sueño por el bullicio de vecinos aterrados que habían percibido el sismo con mayor intensidad. "Normalmente, suelo despertarme a las seis de la mañana, pero hoy el alboroto de mis vecinos me sacó de mi sueño más temprano", relató Jiménez.
El temblor se sintió con fuerza en las provincias de Santiago y María Trinidad Sánchez, y las vibraciones se percibieron en La Vega, Moca, Fantino, Cotuí, San Francisco de Macorís, Salcedo, Bonao y otros puntos de la región. La geografía misma temblaba, transmitiendo una sensación de fragilidad a lo largo y ancho de la zona.
Puerto Plata ya ha experimentado el impacto de temblores en el pasado. El 23 de septiembre de 2003, un sismo sacudió la ciudad, provocando el colapso de numerosas edificaciones, incluyendo dos importantes centros educativos, y causando la trágica muerte de un vigilante privado que trabajaba en un hotel del municipio cabecera.
Los informes de este incidente en la madrugada indican que el temblor afectó a los nueve municipios de la provincia. Como consecuencia, se registraron al menos seis réplicas menores en Santiago y Puerto Plata, en las cercanías del epicentro de este sismo de magnitud 5.2. Hasta el momento, no se han notificado pérdidas humanas ni materiales, pero la comunidad permanece en alerta ante cualquier eventualidad.
Por redacción de Diario Cibao | Santiago RD | 18 de mayo de 2023
