Santo Domingo._ El Consejo Dominicano de la Unidad Evangélica (Codue) advirtió ayer que República Dominicana está atravesando por momentos de muchas tensiones y desafíos constantes y “todos nos preguntamos de cómo podríamos enfrentarlos”.
Consideró que para enfrentar estos males no se ha diseñado una solución, una ruta, un plan para dar respuesta a esta situación que crece cada día afectando el futuro de las presentes generaciones.
“La realidad es que, por años, hemos estado contando con acciones tradicionales, pero dando una mirada retrospectiva, llegamos a una simple conclusión de que las cosas no han funcionado, lo peor del caso es que estamos replicando el mismo modelo, vamos a la deriva como un barco sin rumbo”, precisó la entidad.
El Codue significó que el comportamiento y deterioro que sufren nuestras instituciones en todos los niveles, no es más que el deterioro manifestado a lo interno de las familias y las relaciones entre sus miembros.
“Entendemos que son loables las iniciativas del gobierno por establecer cambios en las instituciones, cambiar de nombre, directores, pero se necesita más que cambio de planes en las instituciones, se necesitan cambios profundos e integrales en cada uno de los dominicanos, para erradicar los males que nos afectan en el orden político, social y económico”, dijo.
El Codue indicó que clama como Juan el Bautista, “una voz en el desierto”, para que se produzcan de manera urgente las reformas integrales que ameritan el esfuerzo de todos, que de manera sincera e igualitaria, “nos sentemos en una gran cumbre y poner las prioridades y pliego de demandas que necesita el país”.