Esta urbe se ha convertido en el epicentro de la lucha política que está por venir con miras a las próximas elecciones presidenciales
La ciudad de Santiago de los Caballeros se ha convertido en un punto clave en la política de República Dominicana, especialmente de cara a las elecciones presidenciales de mayo de 2024.
El presidente Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno (PRM), ha visitado la provincia en más de 15 ocasiones desde que asumió el poder en agosto de 2020, lo que indica la importancia estratégica que esta urbe tiene en la lucha por el poder en el país.
Durante estos viajes ha puesto en marcha una serie de proyectos de infraestructura con el objetivo de impulsar el desarrollo de la región y, a la vez, obtener el apoyo de los votantes en las elecciones presidenciales de mayo de 2024.
Santiago, con su población y economía en crecimiento, se ha convertido en un epicentro político en el que los candidatos a la presidencia deberán centrar su atención y esfuerzos para ganar la simpatía y los votos de los ciudadanos.
En este escenario, el presidente Luis Abinader vuelve hoy a Santiago donde permanecerá hasta mañana para encabezar una serie de actividades que incluyen inauguraciones, inicio de obras y un desfile militar.
Abinader ha sido visto con frecuencia merodeando las calles de Santiago, como si buscara un refugio de la aridez de la política nacional. Pero para algunos analistas, en realidad, su presencia constante en esta ciudad no es otra cosa que una táctica política calculada al milímetro.
En corrillos políticos se habla de que el objetivo de Abinader es nada menos que enfrentarse a su principal contrincante político, Abel Martínez del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), quien reside en esta urbe.
Se trata de una lucha sin cuartel por el poder del país que ha llevado al presidente a desplegar todas sus fuerzas y habilidades para ganar la simpatía de los votantes de esta región tradicionalmente afín al PLD.
La importancia de Santiago ha motivado al presidente a recurrir a una estrategia sin precedentes en la historia política de la nación. Sus adeptos o partidarios aseguran que cada visita a la ciudad es un paso más en un largo camino hacia la victoria, hacia el ansiado trono del poder.
Y el presidente sabe que para lograrlo, debe conocer a su adversario como si se tratara de un libro abierto, aseguran personajes familiarizados con el tema. Es así como, en medio de la efervescencia política, Santiago se ha convertido en el epicentro de una lucha sin cuartel entre dos "gigantes políticos". Una contienda que definirá el destino de una nación y que mantendrá en vilo a sus habitantes hasta que se conozca el resultado final. Un duelo épico que quedará grabado en la memoria de la nación dominicana para siempre.
