Encuentran un cadáver en Paso Bajito que podría ser Gabriel González, desaparecido desde el jueves. Un militar está detenido como principal sospechoso del secuestro y asesinato.
Por Fabio Hernandez
La tranquila comunidad de Paso Bajito, en La Vega, República Dominicana, se vio conmocionada este miércoles tras el hallazgo de un cadáver que podría corresponder al joven Gabriel González, desaparecido desde el pasado jueves. El cuerpo sin vida, de sexo masculino, fue descubierto entre los matorrales que flanquean la carretera que une La Vega con Jarabacoa, una vía transitada que ahora se convierte en escenario de una posible tragedia.
El descubrimiento fue realizado por transeúntes que, alertados por el inusual hedor y la presencia de aves carroñeras, notificaron a las autoridades. Miembros del Ministerio Público y de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM) acudieron de inmediato al lugar, acompañados por equipos forenses y agentes policiales. Tras acordonar la zona, procedieron a la extracción del cadáver, cuya ropa coincide con la que llevaba puesta González en el momento de su desaparición.
La noticia ha generado una ola de consternación entre los habitantes de La Vega y, especialmente, entre los familiares y amigos de Gabriel González, un joven conocido en la comunidad por su carácter afable y trabajador. Su desaparición había movilizado a vecinos y autoridades en una intensa búsqueda que ahora podría tener un trágico desenlace.
En el centro de las investigaciones se encuentra Jonathan Santos, miembro del Ejército de República Dominicana, quien ha sido detenido y está siendo interrogado como principal sospechoso. Según testimonios recabados por las autoridades, Santos y González habrían tenido un altercado en una piscina ubicada en la localidad de Arenoso, La Vega, poco antes de la desaparición del joven. Aunque los detalles del incidente aún no han sido revelados, esta disputa podría ser clave para esclarecer los hechos.
Fuentes cercanas a la investigación señalan que Santos ha mantenido un comportamiento evasivo durante los interrogatorios, lo que ha incrementado las sospechas en su contra. Además, se están analizando registros telefónicos y cámaras de seguridad de la zona para reconstruir los movimientos de ambos individuos en los días previos al suceso.
El cuerpo hallado será trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), donde se le practicará una autopsia exhaustiva. Los expertos forenses buscan no solo confirmar la identidad del fallecido mediante pruebas de ADN, sino también determinar la causa exacta de la muerte y el tiempo que el cuerpo llevaba en el lugar.
Mientras tanto, la comunidad de Paso Bajito y los alrededores permanecen en vilo, esperando respuestas que arrojen luz sobre un caso que ha sacudido la tranquilidad de la región. Organizaciones de derechos humanos y colectivos sociales han expresado su preocupación por la posible implicación de un miembro de las fuerzas armadas en un hecho tan grave, instando a las autoridades a llevar a cabo una investigación transparente y exhaustiva.
Este caso se suma a una serie de incidentes que han puesto en tela de juicio la actuación de algunos miembros de las fuerzas de seguridad en República Dominicana. La sociedad civil exige justicia y que se esclarezcan los hechos con celeridad, para que la impunidad no siga socavando la confianza en las instituciones del país.
