El ataque ocurrió la madrugada de este lunes en el sector Pueblo Nuevo, durante un “teteo” que terminó en pánico y sangre.
Diario Cibao
Santiago, República Dominicana. — El eco de la música aún resonaba en las calles de Pueblo Nuevo cuando los primeros disparos rompieron la madrugada de este lunes. El barrio, acostumbrado a las fiestas improvisadas conocidas como teteos, se despertó sobresaltado. Minutos después, dos jóvenes yacían sin vida sobre el pavimento y varios más corrían heridos en distintas direcciones.
La Policía Nacional identificó a uno de los muertos como Scory Manuel Tejeda, de 23 años, y el otro permanece sin identificar.
Los atacantes, según los informes preliminares, habrían llegado al lugar en un vehículo, abrieron fuego y escaparon rápidamente entre las calles estrechas del sector.
Los vecinos describieron escenas de pánico. “Todo fue muy rápido. Primero los tiros, después los gritos”, contó una mujer que observó el hecho desde su balcón. “Ya uno no puede dormir tranquilo aquí”.
Agentes del Departamento de Investigaciones Criminales (DICRIM) y técnicos forenses del Ministerio Público trabajaron durante horas recogiendo casquillos de bala, revisando cámaras de seguridad y entrevistando testigos. Hasta la mañana de este lunes, las autoridades no habían establecido el móvil del crimen.
El suceso ha reavivado el debate sobre la seguridad pública y la proliferación de los teteos, reuniones callejeras que mezclan música a alto volumen, alcohol y, cada vez con más frecuencia, violencia. En sectores como Pueblo Nuevo, donde la presencia policial es escasa, los residentes reclaman acciones más firmes.
“Necesitamos patrullas, necesitamos orden”, dijo un líder comunitario mientras observaba el lugar acordonado por la policía. “No queremos que la próxima víctima sea un niño que esté durmiendo en su casa”.
Mientras tanto, los ecos del tiroteo aún resuenan en Santiago, una ciudad que, entre la música y la tragedia, lucha por recuperar la calma.
