Fiscalía logra medida de coerción tras investigación que revela años de barbarie contra una niña de 11 años, con la complicidad activa de ambos agresores.
SANTIAGO, República Dominicana. Un tribunal de esta jurisdicción, acogiendo la solicitud del Ministerio Público de Santiago, dictó prisión preventiva como medida de coerción contra un hombre y su pareja sentimental. Ambos son investigados por los horribles crímenes de tortura, barbarie, violación sexual, y abuso físico y psicológico perpetrados contra una niña de tan solo 11 años de edad.
La Unidad de Atención Integral a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la fiscalía ha liderado la exhaustiva investigación. Para ello, se ha desplegado un equipo multidisciplinario que incluye psicólogos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif). Este equipo ha realizado pesquisas y evaluaciones integrales a la víctima a nivel físico, emocional y psicológico, cuyos informes evidencian la gravedad del daño causado por los atroces abusos.
En su solicitud de medidas de coerción, el órgano persecutor expuso que la víctima ha sido sometida a violación sexual, golpizas y todo tipo de vejámenes desde la edad de 9 años. La investigación ha revelado, además, la escalofriante complicidad de la mujer, quien no solo tenía conocimiento de los abusos, sino que también participó activamente en su ejecución.
La Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santiago impuso la medida de coerción en atención a la calificación jurídica provisional imputada al procesado. Esta incluye la violación de diversos artículos del Código Penal Dominicano, modificado por la Ley 24-97 sobre Violencia de Género, relativos a la tortura o actos de barbarie y la violación sexual. También se le imputa la violación de artículos de la Ley 136-03 que crea el Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes, que tipifican el maltrato, abuso físico, psicológico y sexual en perjuicio de la menor.
Contra la imputada se presentaron cargos provisionales por transgresión a artículos del Código Penal Dominicano, modificado por la Ley 24-97, y por la violación de artículos de la referida Ley 136-03, que penalizan el maltrato, abuso físico, psicológico y sexual contra niños, niñas y adolescentes.
La Fiscalía de Santiago enfáticamente recordó la primacía de los derechos fundamentales de todos los niños, niñas y adolescentes, subrayando la obligación del Estado de garantizar su pleno y efectivo disfrute y ejercicio.
