Sánchez Ramírez., República Dominicana. – El sacerdote Nino Ramos denunció este martes que la empresa minera Barrick Pueblo Viejo ha bloqueado intencionalmente el cauce del río Naranjo en al menos cuatro puntos consecutivos, afectando a comunidades cercanas y poniendo en riesgo el equilibrio ambiental de la zona.
Ramos, quien acudió al lugar junto a otros religiosos, aseguró que la intervención de la minera impide el libre paso del agua, lo que ha provocado una notable reducción del caudal en diversos tramos del río.
“El comunicado de Barrick es totalmente falso. Estuvimos allí y constatamos cómo han obstruido el arroyo Naranjo para que el agua desaparezca. Es un ecocidio en toda regla”, afirmó el sacerdote.
El religioso calificó la acción como un “crimen ambiental”, citando el concepto de ecocidio como “la destrucción masiva, daño extenso y duradero o alteración grave del medio ambiente que causa graves daños a los ecosistemas”.
A pesar de los bloqueos, el río continúa brotando en algunos puntos, pero con menor intensidad, lo que ha generado preocupación entre los residentes de la zona por los efectos que podría tener en los recursos hídricos y el medio ambiente.
La posición de Barrick
En contraste, la empresa Barrick Pueblo Viejo emitió un comunicado en el que asegura que las intervenciones en el río forman parte de su “compromiso con la gestión ambiental responsable”.
La minera explicó que ha construido canales de derivación, diques de sedimentación, vertederos de emergencia y cruces de tuberías estructurales con el objetivo de mitigar el arrastre de sedimentos durante la temporada de lluvias y proteger las tomas comunitarias.
Según Barrick, estas obras son supervisadas mediante un estricto programa de inspecciones diarias.