Anoche, en la sede de la Dirección Regional Noroeste de la Policía Nacional, se presentó la quinta persona buscada y capturada en relación con el secuestro de una niña de ocho meses en el sector Yerba de Guinea de Mao, y su posterior rescate en el municipio de Monción, provincia de Santiago Rodríguez.
El joven en cuestión, Humberto Manuel Martínez Abreu, de 24 años, habitante del sector Don Bosco de Mao, tras ser interrogado por miembros de la Subdirección de Investigaciones Criminales (Dicrim), admitió haber sido contratado solo como conductor para transportar a la menor.
No obstante, Martínez Abreu también reveló que fue Alexandra Rodríguez Núñez, apodada "La Rubia", ya detenida, quien lo contrató por la cantidad de mil dólares.
El padre Gabriel, representante de la Iglesia Católica, y miembros de la prensa de Mao entregaron a Martínez Abreu, quien se encontraba en búsqueda activa debido a su implicación en el caso. En las próximas horas, será puesto a disposición de la justicia para proceder con los trámites legales pertinentes.
El secuestro de la niña de ocho meses en el sector Yerba de Guinea de Mao había causado gran conmoción en la comunidad de Valverde y en toda la provincia Noroeste de la República Dominicana. Desde el primer momento en que se reportó el incidente, las autoridades policiales se movilizaron rápidamente para dar con los responsables y recuperar a la pequeña.
El rescate de la bebé en el municipio de Monción, provincia de Santiago Rodríguez, fue una gran victoria para la Policía Nacional y las fuerzas de seguridad, quienes trabajaron incansablemente para dar con los captores y traer de vuelta a la menor a su hogar. Sin embargo, la investigación no terminaba allí, ya que aún había personas implicadas en el caso que necesitaban ser identificadas y detenidas.
Es por eso que, tras la entrega de Humberto Manuel Martínez Abreu en la sede de la Dirección Regional Noroeste de la Policía Nacional, se inició un nuevo capítulo en la investigación del secuestro. La confesión de Martínez Abreu y su implicación como conductor en el traslado de la niña arrojaba nuevas pistas sobre los autores intelectuales del rapto y su posible motivación.
La detención de Alexandra Rodríguez Núñez, quien supuestamente contrató a Martínez Abreu para llevar a cabo el secuestro, también representaba un gran avance en el caso. Las autoridades continuaron trabajando incansablemente para esclarecer todos los detalles del suceso y llevar a todos los responsables ante la justicia.
Mientras tanto, la comunidad de Valverde y Mao seguía en estado de shock por lo sucedido y se mantenía en alerta ante cualquier indicio de nuevas amenazas a la seguridad y tranquilidad de la población. La recuperación de la bebé era una gran noticia para todos, pero no se podía bajar la guardia en un mundo cada vez más peligroso y lleno de amenazas.