En sus estrategias en torno a propulsar con idoneidad de cara al presente y al futuro el desarrollo de República Dominicana, el Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD) estima indispensable que los diferentes sectores sociales y los liderazgos del país, tras concluir el proceso electoral y dar paso a un nuevo gobierno, deben proponerse como principal tarea romper con los sectarismos irracionales y las conductas mezquinas.
Todo ello permitirá motorizar un proceso económico, político y social que guíe con eficiencia los cambios y transformaciones exigidas por el desarrollo, la justicia y la paz sustentable a los estamentos del Estado y a todos los integrantes de la sociedad dominicana.
Para la correcta implementación de dichos propósitos, el organismo de desarrollo estima de vital importancia un cambio de visión y mentalidad.
Igualmente se requiere la transición generacional y la consolidación de nuestras instituciones para constituir columnas esenciales y motorizar con sabiduría el desarrollo y el progreso social que amerita nuestra nación.
Lo señalado impondrá que nuestros liderazgos políticos y sociales sean ciertamente capaces de concretizar lo que dicen y prometen al momento de tomar la conducción de las instituciones bajo sus manos.
Dentro del referido criterio, es del parecer, que el rumbo que enmarca se impone concretizarlo en nuestra sociedad y principalmente en los estamentos del Estado.
Se necesita una nueva forma de pensar, que exige de nuestras entidades políticas y sociales, como también de sus liderazgos, ir tras una correcta visión que les permita asumir un sustancial y beneficioso accionar social y político.
Romper el sectarismo requiere de conciencia
Lo cual ve alcanzable, en razón de contemplar un aumento en nuestra población de los niveles de conciencia de cómo debe producirse el progreso y el desarrollo socioeconómico y sociopolítico. Además, sobre cuales son las mejores alternativas a seguir para obtener reales soluciones a los diversos problemas que afectan nuestra nación.
Propósitos que estima que conducen a una mayor valoración en torno a que nuestros problemas no pueden ser solucionados por un líder determinado o por grupos de intereses, sino que su idónea solución debe soportarse en los niveles de preparación, capacidad, vocación de bien y una sincera implementación de la concertación social.
Los grandes cambios que se requieren en todos los estamentos políticos y sociales del país, hoy en día reclaman de nuestros gobernantes, los partidos y todas nuestras instituciones, como también, a los diversos liderazgos, acoplarse a los requerimientos de los nuevos tiempos y la realidad social en que convivimos, con el objetivo de cumplir en la mayor plenitud posible, con roles y las labores que están llamados a cumplir como promotores del desarrollo y el progreso social.
Dentro de las tan primordiales metas, para el Consejo Regional de Desarrollo, Inc.(CRD) constituye una tarea de gran relevancia a cargo todos sectores de nuestra nación, tomar el camino luminoso y fecundo que les ofrece la concertación y una auténtica implementación de la paz social.
Todo esto servirá para relanzar nuestra nación hacia una nueva etapa histórica que le facilite mayores grados de justicia y desarrollo social dentro de una sociedad sustentada en sus mejores valores, capacidades e ideas.
Por doctor Ysócrates Andrés Peña Reyes, Director General del Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), abogado y politólogo. Correo: [email protected]
