
La vaguada mantiene nueve provincias en alerta amarilla y catorce en verde, mientras comunidades claman por obras que nunca llegan.
Diario Cibao
Santo Domingo.- República Dominicana — Con las lluvias provocadas por una vaguada y una onda tropical que mantienen al país en estado de alerta, los residentes de Santo Domingo Este repiten una escena ya conocida: calles convertidas en ríos y promesas oficiales que se disuelven con cada tormenta.
En el sector Lotería de Savica, Junior Florián, comerciante de la calle Penetración número 28, lamenta que las inundaciones sean una constante desde hace más de diez años. “Se fue el Cañero, se fue el Músico, ahora está Dio… que haga algo por una solución final”, exige con frustración. Según relata, más de cien familias viven atrapadas entre el agua, el lodo y la indiferencia de las autoridades.
Los negocios también sufren pérdidas, mientras padres temen por la seguridad de los estudiantes del colegio y el centro infantil ubicados en la zona. A pocos kilómetros, en el sector Juan Pablo Duarte, Julio Aníbal Martínez recuerda que la comunidad lleva más de veinticinco años esperando que el gobierno repare los drenajes pluviales.
Las lluvias de este domingo afectaron la avenida San Vicente de Paúl, la carretera Mella, la autopista Coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez y otras vías principales.
El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) mantiene nueve provincias en alerta amarilla —entre ellas Santo Domingo, San Pedro de Macorís y La Romana— y catorce en verde, incluyendo Santiago, Duarte y Barahona.
Mientras tanto, los residentes siguen esperando que la próxima tormenta no vuelva a ser la misma historia de siempre.




