
Estrategia 2025-2028 busca enfrentar desafíos sociales y ambientales, priorizando sostenibilidad y eficiencia en servicios hídricos provinciales.
SANTIAGO, República Dominicana — En un esfuerzo por transformar el panorama del agua en la provincia de Santiago, la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) presentó este jueves su Plan Estratégico Institucional 2025-2028. El documento traza una ruta centrada en la expansión del acceso al agua potable, el tratamiento de aguas residuales y una gestión pública más eficiente.
“El plan es una guía para avanzar con responsabilidad, transparencia y eficiencia en el servicio que brindamos”, declaró Andrés Cueto, director general de la institución, durante la ceremonia oficial. Según explicó, la estrategia responde a los actuales retos sociales, ambientales e institucionales, poniendo en el centro a la comunidad y la sostenibilidad.
Felipe Rodríguez, director de planificación y desarrollo de Coraasan, detalló que el plan se articula en tres ejes estratégicos: garantizar el acceso universal a agua de calidad, optimizar la gestión financiera institucional y elevar significativamente el volumen de aguas residuales que son tratadas.
La iniciativa recibió el respaldo de autoridades locales y representantes del gobierno central. Mariana Moreno, vicealcaldesa de Santiago, destacó que el plan “fortalece la planificación y garantiza un uso más eficiente de los recursos públicos en el área de servicios hídricos”, abriendo la puerta a una mejor articulación entre las instituciones municipales y nacionales.
Entre los asistentes al evento figuraban el alcalde de Santiago, Ulises Rodríguez; el presidente del Consejo de Directores de Coraasan, Conrado Asencio; representantes del Ministerio de Hacienda, del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), así como del programa social Supérate.
La presencia de estos actores sugiere que el nuevo plan podría marcar el inicio de una etapa más colaborativa en la gestión de los recursos hídricos del país.
El documento estratégico también contempla mecanismos de monitoreo y evaluación periódica para medir el impacto de las acciones implementadas.
Según indicaron los responsables del plan, se establecerán indicadores de desempeño que permitirán ajustar las metas en función de los resultados y las condiciones cambiantes del entorno, con el fin de asegurar una mejora continua en la prestación de los servicios.